Bebidas deportivas usadas durante el ejercicio, ¿Son recomendables o no?
Durante el entrenamiento se pierde mucha agua, por consecuencia el cuerpo no tendrá la hidratación necesaria para lograr el rendimiento adecuado. Las bebidas deportivas se consumen durante el ejercicio con fines de hidratación y aporte de energía, para mejorar el rendimiento deportivo y retrasar la aparición de la fatiga. Su objetivo principal es mejorar el rendimiento durante el ejercicio, lo logran gracias a que ayudan a minimizar los factores causantes de fatiga, algunos de ellos son: el agotamiento de las reservas de glucógeno y el inicio de la deshidratación (resultante de la pérdida de agua y electrolitos en la sudoración).
El consumo de bebidas deportivas durante el entrenamiento.
El consumo de estas bebidas durante y después del ejercicio va a cumplir con las siguientes 3 funciones: prevenir la deshidratación, suministrar carbohidratos para aumentar la energía disponible y proporcionar electrolitos para reemplazar las pérdidas en la sudoración.
Principales ingredientes de las bebidas deportivas.
El ingrediente principal es el agua, también contienen otras sustancias como carbohidratos y electrolitos, los cuales, cumplen con diversas funciones que pueden ayudar a mejorar el rendimiento deportivo. La mayoría contienen entre 6 y 8% de carbohidratos, así es que 240 ml de bebida contienen aproximadamente 14 g de HCO. Los principales tipos de HCO utilizados son: glucosa, fructosa y sacarosa, sin embargo, el uso de polímeros de glucosa, como la maltodextrina, ha aumentado en los últimos años.
La cantidad de HCO que se deben consumir durante el ejercicio va a depender de la intensidad y duración del mismo. Cuando el ejercicio es de duración mayor a 2 horas se recomienda consumir HCO para que éstos funcionen como combustible, y así, se tenga un mejor rendimiento y si es en condiciones de extremo calor se deben consumir desde antes para tener este combustible desde el principio.
Electrolitos.
Los electrolitos son minerales con una carga eléctrica que se encuentran presentes en fluidos corporales y son necesarios para el funcionamiento del organismo. En la actividad deportiva sudamos, por consecuencia perdemos cantidades importantes de agua y de electrolitos a través del sudor. Por ello, es esencial que después de un entrenamiento o competencia se repongan para evitar deficiencias.
Las cantidades de electrolitos que contienen estas bebidas (principalmente sodio y potasio) ayudan a restaurar el equilibrio químico de nuestro cuerpo y cumplir con las siguientes funciones:
- Prevenir la hiponatremia (niveles bajos de sodio en la sangre)
- Incrementar la tasa de absorción de agua.
En conclusión, la ingesta de estas bebidas es situacional, de acuerdo al ejercicio realizado o en caso de presentar un alto nivel de deshidratación. No es recomendable usarlas en exceso o en la vida cotidiana ya que al consumirlas estás ingiriendo calorías y otros elementos que no vas a usar y tampoco te van a aportar ningún beneficio, por lo tanto, solo serán opción si vas a hacer deporte de más de dos horas y/o en condiciones de calor intenso donde la descompensación sea severa.